El
nacimiento de la lingüística cognitiva se encuentra relacionada con ciertas
críticas hacia la psicología conductista que ha contribuido a actividades de
tipo materialista en el análisis del lenguaje.
Tiene
por objeto
de estudio el lenguaje en relación con los procesos que intervienen en el
conocimiento y en la percepción.
Abarca
el análisis de los factores internos que regulan la actividad lingüística > las
representaciones mentales del enunciado o del discurso.
Es una corriente disciplinar que utiliza los
datos de otras ciencias para estudiar desde diferentes perspectivas el
funcionamiento de la mente humana.
El
lenguaje debe ser descrito teniendo en cuenta otras destrezas mentales como,
por ejemplo, la memoria, el razonamiento
(inductivo-deductivo) y la percepción cognitiva.
El
desarrollo de la lingüística cognitiva (años 80) ha confluido en dos factores
influyentes:
a)
Influencia del mentalismo chomskiano.
b)
Creciente auge de los estudios dedicados a la
dimensión pragmática del lenguaje.
La
corriente cognitiva, debido a su concepción del significado, es actualmente la
corriente que ofrece una adecuada articulación entre los planos del sistema y
los planos
del discurso.
LINGÜÍSTICA DEL HABLA (O DE LA
COMUNICACIÓN)
Las
corrientes lingüísticas que se desarrollan en las últimas décadas del siglo XX
se centran en el HABLA.
La
figura del hablante-oyente ha pasado a ocupar un primer plano en el análisis
lingüístico.
Los
estudios centrados en el análisis de secuencias de hablas son dos: la
pragmática y la lingüística del texto.
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